Blogia
Trapera

PAPAM HABEMUS

(Por el Profesor Ruano)

Al iniciar este trabajo lo hice pensando incluirlo en el del profesor Bethencourt, titulado "Ha muerto Juan Pablo II". A él se debe, pues, que este escrito salga. Nada es original: ni su origen ni su desarrollo y ni siquiera su desenlace, sea cual fuere. Debido a su extensión y para evitar que mis deducciones, más o menos subjetivas, puedan ser atribuidas a otra persona, he optado por publicarlo como tarea independiente.

Aun lamentando mi falta de confianza (¿de fe?), no puedo menos que expresar mi escepticismo y lectura crítica ante la homilía (declaración de intenciones) de Benedicto XVI. En mis ya un poco lejanos recuerdos se halla Benedicto XIII y su "¡yo sigo!" En el nuevo Papa se trata de "la tarea de la Obra", coincidentemente, ambas españolas. Benedicto XVI no hará su voluntad sino la de Dios. Efectivamente, la "Obra de Dios", o sea, el "Opus Dei". No se puede pedir mayor sinceridad de cara a un observador que procura leer entre líneas o, dicho de otra forma, en el tercer grado de abstracción.

Desde el mismo momento de su elección, el nuevo Papa quiso dejar claro que la misma se la debía a su antecesor. Siendo así, ¿debemos colegir que el Espíritu Santo y Juan Pablo II habían seleccionado a los cardenales adecuados para escoger la sucesión?

Me pregunto si el uso exclusivo del genero masculino --excepto cuando dice: "religiosos y religiosas", lo cual no es una novedad ya que resulta inevitable-- se hace por costumbre, sin que ello --a mi modo de ver-- implique preferencia de sexo, o mas bien sigue las directrices de "Camino", conforme a su autor monseñor Escrivá de Balaguer, verdadero seguidor de la cultura patriarcal en pleno siglo XX.

Benedicto XVI inicia su tarea comunicativa (comunión cristiana) soslayando la lengua de la mayor parte del mundo católico, el idioma español, originario de Castilla y extendido no solo a toda la España europea sino también a sus conquistas y colonizaciones . De las lenguas usadas por Benedicto XVI, solo el inglés supera en hablantes a los usuarios del español. ¿Por qué lo hizo? Difícil saberlo. Elucubremos: Usa italiano por razones obvias; el alemán, por un obvio nacionalismo; el francés, pues es la lengua "cristianísima", y bien vale una misa, y el inglés, por la obvia globalización. Eso es modernidad. El español venia quizás a significar el recordatorio de su homónimo valenciano, y aquí cada uno sigue en sus "trece"; o puede que no debiera usarlo como penitencia a los desafectos que rigen la, en otro tiempo, "católica" España. Sea lo que fuere, lo desconocemos. Los motivos pueden ser múltiples: que no sabe el idioma, que Franco se merece un castigo por no ayudar a "su pueblo" cuando él era un joven luchador germano, y mil tontas razones mas que se me ocurrieran. Algún día se sabrá.

Por un momento parecía que, en su homilía, Benedicto XVI iba a unirse a los menesterosos, a la Iglesia de los humildes, a la Doctrina de la liberación. Pero fue solo una ilusión pasajera. Benedicto XVI, para más INRI, usa las parábolas del Ungido (XRISTOS) y las adorna metafóricamente para evitar que pueda parecer que esta o aquella crítica son "obra suya".

En fin, me pregunto si su tarea será un ínterin o lapso temporal hacia otra de esperanzadora mayor aceptación de la humanidad disidente, creyente o no. Claro que dos mil años de ejercitación generan capacidad más que suficiente para producir toda clase de sorpresas. Ojalá sea así, con permiso de la Obra, claro.

9 comentarios

Profesor Ruano -

Por el bien de la Humanidad y de la humanidad de todos los seres, me alegra que Benedicto XVI condene el genocidio nazi. Hay un pequeño atisbo de esperanza.

Profesor Ruano -

No estaría de más que, si alguien no lo ha visto, le echara un vistazo a iblnews.com del lunes 9 ó a periodistadigital.com de hoy martes. Las "Opera Dei" de Benedicto XVI comienzan a dar sus frutos; pero sin sorpresas, no en vano ¿quién es el mayor enemigo de la Obra? Efectivamente: san Ignacio, un vasco.

Rogers -

Profesor Ruano, besotes desde California, hombre de poca fe, pero de gran corazon :)

Aguayro -

Ya, ya. Pero, con todos mis respetos, sigo sin comprender porque tambpoco se trata de hacer una revolución a rajatabla pero sí utilizar la prudencia para dar otro aire de progreso, de atención verdadera a los aspectos más humanos. Aquí se ha utilizado la prudencia para afianzar aún más la rigidez, la política derechosa que viene haciendo la iglesia desde Juan Pablo II a aún más. Aquí lo que se quiere es poder y mantener a la pobre gente en el engaño. ése es mi punto de vista.

Luis -

Yo, Aguayro, con lo de prudencial me refería más bien a la lentitud en el obrar que caracteriza a todo aquel que es prudente. En absoluto pienso que lo más prudente haya sido elegir a este papa. Pero..., así es una institución como la Iglesia (entendida desde la jerarquía). Un grupo de señores, que frisa en su mayoría los ochenta, y teniendo en cuenta que su obra se encamina hacia la Eternidad, piensan más a largo a plazo. Hoy por hoy, creo que la masa más importante de los católicos practicantes del mundo son bastante reaccionarios.

Aguayro -

Sí, sí, lo comprendo profesor Ruano, solamente quería apuntar el tema porque a mí personalmente nuevo no me parece el papa sobre todo por sus ideas, claro, y por lo que representa, que no es nada nuevo. Por otro lado, lo que dice Luis que "el Espíritu Santo ha obrado de manera prudencial", en fin, la verdad es que no lo comprendo mucho. Ratzinger lleva 20 y tantos años de ideólo del papa anterior y, desde luego, de toda la curia y ¡vamos si ha influido! ¿dónde ha estado la prudencia del Espíritu Santo todos esos años? Creo, sinceramente, que Ratzinger ha tenido ansias de poder y, lo que es peor para mí, ha llevado una orientación del mundo inmovilista y poco progresiva y el ejemplo más concreto y grave ha sido su posicionamiento con la Teología de la Liberación. ¿Tiene excusas Ratzinger y el anteior papa? Algunas dicen que Juan Pablo II dialogaba, bueno creo más bien que ha sido todo una fachada u producto de un marketing ¿cómo si no!

Profesor Ruano -

Gracias a Luis y Aguayro(inversión adversum cacofonía) por sus sugerentes aportaciones. No digo "nuevo" ni por la edad, respetable siempre, ni porque su elección represente novedad alguna, sino más bien porque cuando lo escribí era reciente su elección, aunque la "edición" se retrasó algo debido a que carezco de placet para realizar la inserción directa, y mi "manager" se encontraba de viaje, por lo que el escrito salió ligeramente retrasado con respecto a alguna de mis observaciones.
Por otra parte, hago referencia a una interinidad pensando no tanto en su brevedad biológica --pues no me permitiría usurparle a Casandra sus poderes-- como para expresar el deseo de que el lapso de tiempo que ocupe "el actual Papa", deje paso a otro periplo más acorde con "el sentimiento de la mayoría {que} no comulga....con el de la jerarquía". Sin embargo esa esperanza la considero fútil, ya que la Obra lo sabe y puede actuar en alocada consecuencia regenerando regresivamente el Colegio Cardenalicio, con lo que más que un timo de la estampita parecería un estraperlo de carácter oficial, y entonces sí que podría producirse //la partición, el cisma y la escisión/ y se demostraría/ cuánta razón tenía/ la Teología de la Liberación//.

Luis -

Yo también espero que sólo sea ínterim. De hecho creo que sólo puede ser un ínterim por la edad del pontífice. Es curioso, la Obra y la Inquisición, ambas invenciones españolas, encarnadas en un mismo sujeto. Yo, sin embargo, creo que el Espíritu Santo (eufemismo para el Colegio Cardenalicio), ha "obrado" de manera prudencial. Es decir, no ha querido una revolución después de un papado conservador. Mejor uno de tinte también conservador, pero breve, para poder observar la reacción de los fieles y actuar en consecuneciaen el próximo cónclave. Las figura mediática de Juan Pablo II consiguió ocultar el retroceso con respecto al Concilio Vaticano II. El Catolicismo de la Curia se encuentra en su salsa en lo mediático. Pompa y vacío. Imágenes de estampita. El sentimiento de la mayoría no comulga, sin embargo, con el de la jerarquía. La Iglesia debe cambiar o no tendrá sentido. Si no, benéfico rayo la parta (la escinda o la cismatice), lo mismo da.

Aguayro -

Yo más que llamarlo "el nuevo papa" le llamaría "el actual papa" porque creo, junto con Juan Pablo II, han contribuido, con su política eclesiática, a confundir a la gente y a un inmovilismo total del ser humano. Me parece grave y como tal hay que expresarlo.