Atentos a la izquierda alemana
(p. P. Tacoronte)
La política alemana anda bastante movida. Las reformas que el SPD ha presentado con el nombre de Agenda 2010, de orientación liberal, han despertado un resurgir de la intención de voto de las izquierdas. Muchos alemanes se niegan a desprenderse de las mejores conquistas del Estado de bienestar, es decir, de los correctivos sistemáticos con que el Estado y trata de compensar la violencia de la acumulación originaria de dinero.
Como apuntaba algún periodista del Spiegel, todos los expertos están de acuerdo en la supuesta racionalidad económica de entregar el gobierno al inhumanismo sin rostro del mercado, pero muchas vidas concretas de nombre propio saben lo que significan la competencia y el individualismo que promueve la falacia naturalista del todos contra todos como organización sin restricciones de la vida cotidiana.
En ese contexto, el partido a la izquierda del SPD, el PDS, encabezado por G. Gysi, obtendría de celebrarse en estos días las elecciones, coaligándose al nuevo WASG (escindidos del SPD que están contra las reformas), un respaldo popular mayor que la derecha, el CDU, en toda Alemania oriental. Así lo muestran las encuestas sobre intenciones de voto realizadas por el Spiegel el 12 y 13 de julio.
Aunque sólo sea un dato ilustrativo, que los medios sobredimensionaron, recordemos que hace apenas un par de meses tuvo lugar en Alemania un Kapitalismusdebatte, un debate social sobre la moralidad del capitalismo, a raíz de una palabras poco amables de F. Müntefering, del SPD, sobre la clase patricia de los empresarios. Muchos comentaristas lo descalificaron como un gesto para la galería, entre ellos el poeta Erzensberger; algo o mucho de eso había; pero algo también debe significar que en una sociedad acomodada sea posible un debate de esas características. Quién sabe.
La política alemana anda bastante movida. Las reformas que el SPD ha presentado con el nombre de Agenda 2010, de orientación liberal, han despertado un resurgir de la intención de voto de las izquierdas. Muchos alemanes se niegan a desprenderse de las mejores conquistas del Estado de bienestar, es decir, de los correctivos sistemáticos con que el Estado y trata de compensar la violencia de la acumulación originaria de dinero.
Como apuntaba algún periodista del Spiegel, todos los expertos están de acuerdo en la supuesta racionalidad económica de entregar el gobierno al inhumanismo sin rostro del mercado, pero muchas vidas concretas de nombre propio saben lo que significan la competencia y el individualismo que promueve la falacia naturalista del todos contra todos como organización sin restricciones de la vida cotidiana.
En ese contexto, el partido a la izquierda del SPD, el PDS, encabezado por G. Gysi, obtendría de celebrarse en estos días las elecciones, coaligándose al nuevo WASG (escindidos del SPD que están contra las reformas), un respaldo popular mayor que la derecha, el CDU, en toda Alemania oriental. Así lo muestran las encuestas sobre intenciones de voto realizadas por el Spiegel el 12 y 13 de julio.
Aunque sólo sea un dato ilustrativo, que los medios sobredimensionaron, recordemos que hace apenas un par de meses tuvo lugar en Alemania un Kapitalismusdebatte, un debate social sobre la moralidad del capitalismo, a raíz de una palabras poco amables de F. Müntefering, del SPD, sobre la clase patricia de los empresarios. Muchos comentaristas lo descalificaron como un gesto para la galería, entre ellos el poeta Erzensberger; algo o mucho de eso había; pero algo también debe significar que en una sociedad acomodada sea posible un debate de esas características. Quién sabe.
5 comentarios
P. Tacoronte -
daniel -
Tacoronte -
Tacoronte -
Bethencourt -
Te agradecería que la ampliaras en el futuro si fuera posible.