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III CONGRESO DE LA LENGUA ESPAÑOLA

(Por Perera)

Sabrán que en estos días se pondrá en marcha este tercer congreso, en Rosario de Argentina. Y, como tal acontecimiento (digamos) cultural, se ha hablado hoy, sábado 13 de noviembre, en los diferentes suplementos culturales estatales españoles. En concreto, en el “Cultural” del ABC y en el “Babelia” del periódico El País.
No se puede negar que en este marco se van a dar exposiciones y discusiones interesantes, a la luz de las sesiones que se llevarán a cabo: “Aspectos ideológicos y sociales de la identidad lingüística”, “Identidad y lengua en la creación literaria” y “Español internacional e internacionalización del español”.
Habrá un homenaje a Ernesto Sabato, uno de los más atractivos escritores y pensadores-educadores de la realidad actual, con sus últimos libros (utópicos, en el mejor sentido de la palabra; y esperanzadores, en tanto llenos de fuerza para la consecución del cambio de las sociedades en las que vamos viviendo), dirigidos especialmente a la gente joven.
Y allí estarán escritores (digamos) importantes. O un León-Portilla, eminente traductor y especialista de lenguas indígenas americanas.
Sí, todo muy bien.
Pero entonces llegan mis gritos: a pesar de que el congreso rotula “lengua española”, no hay periodista ni entrevistado que deje de decir que hablamos la “lengua castellana”, o sea, “el castellano”. No se nos debe escapar que el nombrar al español de esta forma es ideológicamente (algunos dirán filológicamente) injusto: aunque sea incoscientemente, sigue suponiendo el creer que la variedad española que se habla en Castilla (núcleo originario del idioma, si así se puede hablar) es el GRAN MODELO a seguir por los hablantes del español de todas partes.
Sigo gritando más alto: no hay ni una cabecilla pensante de estos susodichos periodistas e intelectuales que nombre, en algún momento, la modalidad lingüística hablada en Canarias, la peculiaridad de nuestro dialecto, de nuestras hablas. Sobre todo chillo más cuando nos hablan sin ton ni son de diálogo entre las dos orillas, de atlantismo lingüístico y retóricas mentirosas similares.
Ellos dicen: Hispanoamérica (reduciendo la complejidad social y lingüística de todo el continente) y España. ¿Y dónde está Canarias? Se nos dirá que, lógicamente (¿lógica para quién?), forma parte de las diferentes variedades del español de España. O que, incluso, nuestra variedad está cercana, hasta cierto punto (por determinados rasgos), a las variedades americanas, como alguna vez se ha dicho de la historia de nuestra literatura.
Pues mira por donde que, cuando se habla de España o Hispanoámerica (dígase, por ejemplo, en estos suplementos nombrados), no nos mencionan ni por asomo. Ni para decir el tópico de los tópicos injusto para con Canarias: que es un lugar de paso en el idioma (sí, sí, sí, como en historia, como en economía...), tricontinental... o basuras de este estilo. Pues ni para decir necedades como éstas. Necedades, por cierto, que nos niegan siempre: porque nos ponen como un intermedio televisivo, entre un programa y otro, sin ser nosotros los esperados o los viajantes: sino las barcas y los burros que carguen de un lugar a otro, siempre de camino a.
La riqueza cultural de nuestro dialecto (o nuestras hablas, como quieran llamarlo) es asombrosa. Y es diferente a cualquier otra. Y no existimos para muchos. Y eso a pesar de que uno de los grandes estudiosos del español de todos lados, Manuel Alvar, escribió sobre Canarias tantas y tantas veces.
Para muchos no existimos. Así de claro. Así de triste. Y así de asco.
No sé toda la gente que participará en este congreso. Pero si los medios informativos españoles son el referente de lo que allí se hable, mal lo lleva (en ese marco) nuestra forma de hablar: es decir, nosotros. Y sospecho que así será: quizás no haya ninguna sílaba de nuestro español canario.
Acuso a la ignorancia de todos los que vivan esta fiesta lingüística no del español, sino de una buena parte del español.

29 comentarios

Rogers -

Ah! Profesor Ruano, no podria dejar de quitarme el sombrero ante su sabiduria y ejemplar comportamiento, incluso en momentos certeros (yo recuerdo, por ponerle un ejemplo, la primera vez que vine a Los Angeles, como profesora, y estaba asistiendo a unas jornadas para profesores, tambien. Otro maestro (yo tambien lo soy) en este caso de Andalucia (yo no) estaba exponiendo un tema ante unos 300 maestros de todo el estado de California, cuando se le ocurre decir (refiriendose a los estudiantes hispano hablantes) que no hablaban tan bien como debieran, porque no pronunciaban la "c" o la "z" como debia ser. Yo, indignada, me puse en pie, y le dije que si se atreveria a decirle semejante barbaridad a Gabriel Garcia Marquez, por ponerle un ejemplo. Se quedo muy sonrojado, semejante ignorante (porque yo, como linguista, no encuentro un termino mas adecuado para describir su falta de conocimiento al respecto)y rectifico. Yo me senti como una rosa, y hasta la fecha, sigo pensando que nadie tiene el poder que no le queramos dar.
Por ejemplo, nada me ha colonizado, ni lo hara. Y que se atrevan! Los libros me ensegnaron a pensar, y los pensamientos me hicieron libre (cita, no mis palabras). Esta es, en mi opinion, la clave: liberacion mental, espiritual, linguistica, orgullo, centro de uno mismo, etapa egocentrica es la que le corresponde a Canarias.

Rogers -

Tiene mucha tela tu articulo, Perera. Yo empezaria por reconocer que nada ni nadie tiene el poder que no le quieras dar. Canarias es una maravilla, un paraiso lleno de capacidades futuras y realidades torcidas, certeras, tempranas o maduras, segun el momento historico en que se encuentre el proyecto de que se trate. Pero no deja de ser su propio centro, cerca de si misma, de su propia lengua, de su propia historia, y de su propia geografia, y de su propio universo. Una vez esta claro todo esto, la lengua canaria se convierta en protagonista, como debe ser. Los protagonistas no se preocupan porque los dejen al margen, porque son ellos los que convocan las reuniones y celebran las fiestas. Los satelites giran en torno a los protagonistas.
Asi de claro. Ni mas ni menos. Lengua canaria: Por que va a celebrarla quien tiene su propia lengua que celebrar?
Viva la libertad, el bien mas preciado!

Anónimo -

Creo que el debate sobre este tema era muy interesante como para haberlo dejado, desde mi punto de vista, en este punto. Creo que Perera tenía información y sentimiento y no entiendo como se ha parado. Vale.

Anónimo -

Perera, sigo pensando que tu texto inicial tiene coherencia y cohesión. Creo que ahora no estás rezando (lo dije yo en su momento por la repetición de una frase, lejos de ir más allá porque no te conozco. Hay aspectos que habría que reflexionar pero las considero en otros planos del debate. Por otro lado, el discurso de Yupanki no lo capto del todo porque no le capto el tema de peculiaridades de una comunidad en su habla, y digo comunidad, es decir, la cultura reflejada en la lengua, etc. Creo que Canarias tiene su peculiaridades en lengua y que definen su identidad y como tal debe considerarse y plasmarse en el comgreso.

perera -

No me extraña, en absoluto, esa visión decimonónica del (algún) nacionalismo catalán. Igual que muchos en Canarias: el querer hacer de Canarias un estado. A corto plazo, quizás no esté mal. Pero hemos de pensar otras vías políticas, convivenciales. Porque las grandes (complejas) burocracias estatales son tendencias que tienden a reducir nuestras vidas a homogéneas vidas. Aspectos unificadores (mitificadores, que diría Nancy), que compartimos, con los que comulgamos. Y, me da a mí(del verbo "dar-me"), según siento y he aprendido a sentir con diferentes gentes, que esto es un paso hacia el irrespeto de todos.

perera -

tre

perera -

Si el Estado europeo ha de existir (“Europa” hiede, aunque sea reductor así diciéndolo), y nosotros en él, no han de respetar “lenguas” ni baifos parecidos. Me tienen que respetar a mí, es decir, a los que son y no son esa Europa: si me falta una mano; si tengo un oído de más; si soy altanero; si hablo como hablo.
Sí, vale. Ni lengua ni habla: pero ni necesidades teóricas para justificar una unidad (estatal): ni de EL MUNDO, NI DE EUROPA; NI DE CANARIAS (aunque la palabra Canarias nos una: pero sin legalidades UNAS).
Una Canarias más allá de “Canarias” en la legalidad. Más allá de “Canarias” en una historia de la celebración. Una palabra tuya, tuya sola mirando a muchos, en medio de la desgracia.
Y después: un abrazo.
De nuevo comienza la política.

Pienso-escribo: es lo que me sale ahora, cuando siento necesidad de echar. No sé si aportaré algo a estos interesantes comentarios. Espero que Europa no me juzgue por no expresarme “correctamente”.
Porque no escondo nada al decir las cosas de esta manera (rezando, decía alguien): es que así mesale y así las digo. Quizás porque no tengo claro tantas.

perera -

Yo no hablo, así, ninguna lengua. Y punto. Aunque lo que diga se parezca a lo que dice un chileno, o un andaluz (lo único que quiere decir es que tengo algo que ver con ellos, en la historia: para bien o para mal).
La lengua es una coartada para decir: “me perteneces: soy tu estado”. Perdón: “tu Estado”.
Pero entonces tampoco me vale la nomenclatura “lengua”. Yo hablo, y punto. Siendo consciente de que me ha sido enseñada esta manera de hablar. Y se me ha colonizado de esta forma. Pero no puedo abandonar (ni quiero), por decreto, mi manera particular de expresarme

perera -

Porque, en realidad, a uno le tienen hasta las narices con el valenciano y las “lenguas” y los ... de quien sea. No. A mí lo que me tiene que importar es si me respetan mi manera de ser hablador canario. Si a la persona que vive en un rincón de Francia se le respeta como habla; o a alguno de un suburbio de París. Dejémonos de tonterías: esto de las lenguas en el gran Estado que quiere ser Europa (con mayúscula sigue siendo, desgraciadamente) es una opción para la opresión de las minorías diferenciadas. Esto es lo que me han hecho ver Tacoronte y Yupanqui: está claro que yo no me entiendo con un italiano (o muy poco, palabralmente hablando), ¿pero a mí me van a respetar hablando mi modalidad lingüística? Es decir: ¿de qué injusta lengua estamos hablando?

perera -

Sé que los gritos valencianos no son de hoy, solamente. Pero este tanto retumbro, ahora, con Europa, me parece sospechoso. Es decir: ¿por qué no se ha oído, por lo menos a lo largo de los años en que uno es consciente de algunas cosas, esa fuerte reivindicación del valenciano dentro del estado español?

perera -

Para mí, Canarias es una destrozada. Y punto. Y si no es así, me da igual: pero así quiero pensarlo para "destrozar por ella" (los desalmados).
He de reconocer, como dije anteriormente, que las reflexiones de Tacoronte y Yupanqui me han vuelto la cabeza del revés. Sinceramente. Cosa que me (a)viva, por cierto; porque me ponen en ENTREdicho: me hacen (mucho) pensar. Y pienso (espero no ser pesado, pero esto es lo que puedo dar).

Anónimo -

Si hay que reflexionar eso de que hablamos español, no quiero ni pensar lo que significa eso de "lengua castellana" en vez de "lengua española". Creo que hemos retrocedido. En fin, Perera, que sigo estando de acuerdo contigo de fondo, porque, insisto, lo subrayas en tu discurso es la situación de Canarias en todo esto.

Profesor Ruano -

Canarias ha aportado a la lengua espagnola muchos vocablos que usamos -quiza cada vez menos- en el habla del campo. Podriamos decir que los mau'ros, como los llamamos en Gran Canaria, de los que somos descendientes al menos en parte, ennoblecen el "canario", que no es solo fonetica.
Los paises latinoamericanos se enorgullecen de sus Academias de la Lengua. A Canarias se nos negaba el derecho a tener, una Academia Canaria de la Lengua, pues el Sr. Saavedra estimaba que no estabamos cualificados para tener una Academia de la Lengua Canaria (sic); en fin, la ignorancia -de la lengua, claro- nos mueve a veces a hacer declaraciones inoportunas. Al final se consiguio, tras dura lucha, la creacion de la Academia Canaria de la Lengua, entre cuyos inclitos miembros podemos citar a los profesores Francisco Navarro Artiles, recientemente fallecido, y a Eugenio Padorno, sin demerito para los no citados. Esperemos que algun dia se hallen entre ellos otros luchadores de la Lengua canaria, como Alfonso O'Shannahan, Victor Ramirez, Francisco Tarajano...

Anónimo -

Yo creo, Perera, que en esencia tu artículo es correcto y a mí personalmente me convence, en el sentido de la jerarquías, y el rechazo materializado que se hace a Canarias, a su lengua, su historia, etc, sin mayores profundizaciones.

Anónimo -

Philipe ¿puedes explicar un poco más en que se basa Maragall para decir esas palabras? Espero que no sea otra vez el viejo discurso de decir que la identidad catalana es superior porque tiene lengua y los otros a freír espárragos...

Fernando -

Querido Perera. Allí vamos. Saludos junto.

Anónimo -

En mi comentario anterior me dirigía a Perera. Respecto a lo que comenta Philipe, por los datos que aportas, creo que el daño es mayúsculo. Personalmente me decanto por la unidad que forman pensamiento y lenguaje e incluso a nivel neurológico. Respecto a lo que comentas de las divisiones jerárquica también coincido contigo tptalmente. Creo que Canarias es una gran marginada en todos los ámbitos y como se aprovecha la ciencia para ocultar en vez de favorecer.

Profesor Ruano(2) -

(Vaya, Por fin!)
La cuestion nominal la veo mas desde aspectos historico-politicos que linguisticos. Me explico: Yo, que soy canario primero y sobre todo, entiendo que nosotros hablamos el espagnol de Canarias -el canario-, nunca el castellano. El asunto se me torna realmente complicado, pues no hay forma de llegar a un acuerdo, ya que unos consideran "espagnol" sinonimo de poder politico, y otros entienden castellano sinonimo de poder imperial (aunque solo sea desde el punto de vista linguistico). Permitanme un ejemplo: Hace unos 30 agnos me desplace a Madrid en representacion del Instituto de Tafira-Gran Canaria a una reunion de directores de Institutos Pilotos (yo era entonces vicedirector) y durante una de las sesiones un matrimonio catalano(ella)-aragones(el) comento entre si' algo casi inaudible, en catalan. Aquello fue la de Dios en Cristo! Un castellanoparlante alzo la voz diciendo: "Joder, a ver si hablamos en la lengua del imperio"!(Bueno, en realidad e'l dijo IMPERIO!) No les cuento los cambios de tonalidades faciales que suscito su soez comentario (no olvidemos que fue antes de la muerte de don Francisco). Los segundos que siguieron se me hicieron atronadoramente peligrosisimos. Entendi que nuestra mision en ese momento era distinta y se me ocurrio decir: "Y por que no hablamos en canario?" Aquel comentario distendio la reunion, si bien para mi estaba claro que yo hablaba otra lengua.

Tacoronte Philippe -

Otro dato. Pocas semanas antes de lo de Babelia, se dio la noticia de que los catalanes, Maragall en ristre, estaban indignados con las pretensiones del valenciano de constituirse como una lengua distinta ante la Unión Europea. ¿No repetían el esquema de exclusión y marginación que se ha practicado con el propio catalán? Los argumentos de Maragall (y también del comentarista canario Juan Cruz) aludían a la autoridad científica para distinguir lenguas. Pero esa autoridad sólo se dirime según el principio de identidad. Y sobre él tenemos que preguntar ¿cómo entender la identidad? ¿Como ipse o como idem?, se pregunta Ricoeur. Se trata en cualquier caso de un debate interesantísimo, vital, saludos.

Philippe -

Y más: también la afirmación de Guillén sobre el carácter fraterno casi per se del español. ¿Se olvidó de que la gramática de Nebrija era la traducción verbal de la colonización de América? Creo, de todos modos, que la crítica que podamos hacer debería ir a la raíz de las justificaciones teóricas. Por ejemplo: cada vez que empleamos "dialecto" o "habla" para hablar de nuestras diferencias expresivas conectamos con divisiones jerárquicas que determinan en sí estructuras de jerarquización: lengua/habla, lengua/dialécto. No se me ocurre otra cosa que señalar cómo la teoría no es un lugar libre del principio de exclusión.

Anónimo -

Personalmente, me identifico contigo en el sentimiento que desprendes en tu artículo frente a la desconsideración que tienen a Canarias, y, en concreto, en este congreso, donde Canarias tendría mucha riqueza que aportar.

Philippe -

Cierto que el último Babelia fue pura ideología pasada por el prestigio de ciencia, Perera. Sobre todo me dejó asombrado como un profesor universitario afirmaba que el lenguaje no influye en el pensamiento. ¿Sabes qué significa eso? Barrer con todo el pensamiento de Humboldt, el giro lingüistico en filosofía, de Habermas a Wittgenstein, cargarse la antropología del siglo XX y la mayoría d elos pensadores que en los último 100 años han dicho algo. Y eso es lo que exporta El Babelia.

Philippe tacoronte -

¿no habrá nuevas posibilidades de convivencia política por descubrir? ¿al menos modos distintos de plantear la identidad cultural? Dice Derrida que lo esencial de una cultura es diferir consigo misma. ¿No se da ahí la promesa de otro modo de con-vivencia posible? tenerla en cuenta no significa dejar de tomar decisiones ahora, dentro de lo que conocemos, dígase en las estructuras políticas e identidades culturales tal y como las conocemos. Pero no olvidemos tener un lado del cuerpo en la crítica y en lo posible. Saludos, Anónimo.

Fernando -

Creo que Maragall participa de la misma lógica que Madrid. Sólo que es un más o menos afrancesado y por eso seduce. En realidad, que diga Maragall que el valenciano no existe lo enmarga en la peor de las ideologías, en el culturalismo cientifista eurocéntrico. ¿Qué pensaría Maragall del "canario"? Saludos otra vez.

perera -

Quizás desde una perspectiva de lo (siempre) por-venir. Donde lengua ya no sea "lengua", filológicamente hablando.
Demasiado saturado, en este momento. Pero volveré sobre el asunto.

Profesor Ruano -

(De antemano aclaro que esta es la segunda vez que escribo esta aportacion, pues mis dos intentos anteriones de "enviar" resultaron fallidos y el escrito desaparecio. Lo digo por si alguien quiere aportar alguna ayudita informatica)
Queridos mios, si yo fuera solo un fisquito prudente, no intervendria en cuestiones de lengua...pues ya se sabe. No es mi especialidad. De todas formas no me extragna que una prensa(sobre todo, grafica) -en ocasiones desconocedora de la situacion geografica de Canarias- sea poco sensible a nuestra idiosincrasia.

perera -

Sí, claro. Todas esto está (siempre) por (nuevamente) pensar. Esas dualidades...
Y lo de Maragall como exclusión, también. Lo que pasa es que, por ahora, poco más puedo decir. Este mensaje es irreflexivo, para decir que los comentarios e, incluso, el artículo de Yupanqui alrededor de parecido asunto, me bombean (de bomba) la cabeza. (Me) pone encuestión muchísimas ideas.
Se me mezclan reflexiones entre lo institucional-legal-estatal (ese gran Estado que quiere ser Europa) en relación con lo político-lingüístico. Y, eso sí: creo que para partir (léase este verbo como se quiera) la reflexión hacia algo más justo, hemos de abandonar (¿hasta qué punto?) por momentos el armatoste institucional en el que estamos metido.

Philippe -

Anónimo, creo que en general la defensa nacionalista de la cultura catalana es en en fondo muy similar a las justificaciones teóricas del nacionalismo del XIX y del esquema Estado-Nación de toda la vida. Tuve ocasión de conprobarlo asistiendo a un mitin de ERC. Ello se refleja en la política lingüistica, porque jamás hay linguüistica sin política. ¿Por qué no atender las razones del valenciano, por qué no acoger y subrayar el valor de sus diferencias, por más mínimas que les parezcan? ¿Por qué privilegiar en el debate la homogeneidad?

Profesor Ruano(3) -

Se' que no llegaremos a un acuerdo porque incluso los mejores luchadores por las esencias canarias (me vienen a la mente Francisco Tarajano y Victor Ramirez, por citar solo dos) difieren conmigo. Lo ultimo que se me ocurre es que el deseo de sustituir metodicamente "el espagnol" por "el castellano" lo observe en la ensegnanza hace menos de diez agnos. Nadie quiere/sabe explicar la razon profunda. Yo lo he atribuido al deseo (con trasfondo politico) de hacer ver que , asi, Castilla/el castellano no sustituye a Espagna/todas las lenguas espagnolas.
En fin, si alguno pretende establecer CASTELLANO=MODELO, sabe que les digo?...que por aqui me entra y por aqui me sale. Unicamente, para apoyar mi desplante, la verdad de Dios: Cuando hace mas de 40 agnos fui a Madrid para iniciar una carrera universitaria, al comenzar los estudios genericos de Filosofia y Letras ningun compagnero/a me superaba en conocimientos de latin y griego...Era el unico canario entre mas de seiscientos alumnos de primero. Abrazos.