La Universidad de Las Palmas de Gran Canaria celebra el Dia Internacional contra la Violencia de Genero con un concierto de Martirio
El ciclo de conciertos acusticos "Cara a cara" organizado por el Vicerectorado de Cultura y Deportes de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria acoge el próximo viernes 25 de noviembre un recital de la cantante onubense Maribel Quiñones "Martirio". La cita será en el Paraninfo Universitario y las entradas se pueden adquirir en el servicio de venta telefónico 902-405-504, a traves de la web de La Caja de Canarias, en los cajeros y en la taquilla del Paraninfo el mismo día del concierto.
Escenarios de medio mundo se han rendido a los pies de esta gran diva, contemplando un directo verdaderamente desgarrador.
Martirio ha realizado un profundo trabajo de investigación musical, fusionando coplas con jazz; boleros y tangos con flamenco. Resultado de carácter único y espectáculo de calidad indiscutible que ha ayudado a renovar los caminos por los que discurre la música en España, así como a abrir nuevas fronteras musicales hasta ahora desconocidas.
Con peineta, mantilla y gafas de sol, toda ella transpira vanguardismo. Una persona cuya evolución artística siempre ha ido pareja a su desarrollo personal en una época determinada históricamente.
Esta andaluza es la Madonna del canto español, por su constante necesidad de mejorar, de romper tabúes y buscar una nueva forma de regenerar la música y la vida misma. La Martirio es así, con un espanish acentuado, pero bien única.
Martirio para la modernidad y la posteridad, ha cincelado su personaje artístico con paciencia, esfuerzo, inteligencia y sentido. Renovadora de la estética más cañí, ha sabido oxigenar la canción popular andaluza con letras de futuro y sonidos del presente.
Con imagen "postmoderna" en sus comienzos, exagerada y divertida, la cantante se caracteriza hasta hoy por una voluntad incansable de renovar el lenguaje de la copla. Y consigue refrescarla, acercarla a la gente joven, a los teatros.
Martirio canta de todo y lo hace agregando su talento a plenitud: tangos, boleros, canciones cubanas, coplas, jazz, blues, con su voz grave y controlada, sin estridencias. Tiene personalidad y simpatía por doquier. Una magia casi envidiable, porque su canción es intimista, esa que penetra la carne hasta muy adentro.
Escenarios de medio mundo se han rendido a los pies de esta gran diva, contemplando un directo verdaderamente desgarrador.
Martirio ha realizado un profundo trabajo de investigación musical, fusionando coplas con jazz; boleros y tangos con flamenco. Resultado de carácter único y espectáculo de calidad indiscutible que ha ayudado a renovar los caminos por los que discurre la música en España, así como a abrir nuevas fronteras musicales hasta ahora desconocidas.
Con peineta, mantilla y gafas de sol, toda ella transpira vanguardismo. Una persona cuya evolución artística siempre ha ido pareja a su desarrollo personal en una época determinada históricamente.
Esta andaluza es la Madonna del canto español, por su constante necesidad de mejorar, de romper tabúes y buscar una nueva forma de regenerar la música y la vida misma. La Martirio es así, con un espanish acentuado, pero bien única.
Martirio para la modernidad y la posteridad, ha cincelado su personaje artístico con paciencia, esfuerzo, inteligencia y sentido. Renovadora de la estética más cañí, ha sabido oxigenar la canción popular andaluza con letras de futuro y sonidos del presente.
Con imagen "postmoderna" en sus comienzos, exagerada y divertida, la cantante se caracteriza hasta hoy por una voluntad incansable de renovar el lenguaje de la copla. Y consigue refrescarla, acercarla a la gente joven, a los teatros.
Martirio canta de todo y lo hace agregando su talento a plenitud: tangos, boleros, canciones cubanas, coplas, jazz, blues, con su voz grave y controlada, sin estridencias. Tiene personalidad y simpatía por doquier. Una magia casi envidiable, porque su canción es intimista, esa que penetra la carne hasta muy adentro.
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