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El tiovivo de Garci

(por magacín66)

Siempre me ha llamado la atención el hecho de que todas las películas de José Luis Garci son siempre preseleccionadas por la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España para que opte, en representación de España, a los Oscar de Hollywood, en la categoría “Best foreign language film” (“Mejor película de habla no inglesa”).

Desde el año 1986 es la mencionada academia la encargada de elegir, por votación de sus miembros, la película que represente a España. Hasta hace unos años, el sistema de elección era por una única ronda de votaciones sobre un número de películas españolas estrenadas en un determinado período (creo que en la actualidad este período es el comprendido entre el 1 de octubre y el 30 de septiembre del año siguiente).

Este sistema cambió hace unos años, creando una segunda ronda de votaciones. En la primera ronda, de entre todos los films estrenados en dicho período, se elegirían 3 finalistas, que serían las preseleccionadas. En una segunda ronda se votaría sobre estas tres para elegir a la película que finalmente represente a España en los Oscar de Hollywood.

José Luis Garci fue el primer director español que consiguió un Oscar por una película española en dicha categoría con su película ‘Volver a empezar’. Desde entonces, prácticamente cada año que Garci tiene película es seleccionada por la Academia para “ir a Hollywood”. O por lo menos, preseleccionada, como es el caso de este año, con su nueva película llamada ‘Tiovivo c. 1950”, seleccionada junto con las últimas producciones de los realizadores Almodóvar y Amenábar.

¿Por qué siempre que hay nueva peli de Garci es seleccionada (o preseleccionada)? Algunas de las claves las explicó él mismo en la rueda de prensa de presentación de su nueva película, al manifestar que, primeramente, envía copias de la película, en dvd, a los miembros de la Academia española. En segundo lugar, estrena su película en un cine de Talavera de la Reina dentro del período establecido para así poder optar y el estreno oficial lo realiza el día que la Academia anuncia el título de la que finalmente representará a España en los Oscar. Y todo ello, según sus palabras, con el único fin de conseguir publicidad y promoción gratuita, ya que al estar preseleccionada los medios hablan gratuitamente de ella. Pues con esta medida, Garci y su productora se ahorra, nada más y nada menos, que casi dos millones de euros.

Lo que no explicó Garci es cómo sale elegida, ya que el hecho de enviar dvd’s a los académicos no garantiza su preselección. Yo tengo mi propia teoría, la cual parte de un dato que no es más que un rumor, ya que la Academia nunca lo ha facilitado oficialmente, pero Garci, seguramente, sí hace uso de él, aunque sea ficticio. Se trata del número de personas que votan. En la actualidad la Academia está formada aproximadamente por 1000 profesionales, de lo cuales, al parecer, votan unos 100, según se comenta tanto en foros como en revistas especializadas. El número de películas que entran en la votación son, aproximadamente unas 100, que es el número de películas españolas que se estrenan en un año. De estas 100 películas tenemos que quitar muchas que, seguramente, no obtienen ni 1 voto, pudiendo reducirse la lista a 20 títulos, que es el número de películas realmente importantes cada año. De todos modos, cuantas más películas obtengan voto, más posibilidades.

Hipotéticamente, estamos pues ante una votación donde unas 100 personas eligen las 3 más votadas de un total 20 películas (o alguna más). Eso significa que una película con 10 ó 15 votos puede estar sin problemas entre las 3 finalistas. Ahí es donde cobra importancia el hecho de que Garci envía copia de su película a los académicos ya que se puede dar el caso de que algunos académicos vean la peli de Garci, les guste y la vote, incluso, sin haber visto más que media docena de los 100 títulos estrenados. Por otro lado, miembros del equipo técnico y artístico de la película de Garci son miembros de la Academia y, bueno, no hace falta comprar su voto, ya que votando ellos mismos se benefician de ello.

Pero este año el Sr. Garci no se percató del avance tecnológico que ha supuesto internet y una de las copias de su película, que envió a los miembros de la Academia, ha sido compartida en internet a través del programa de intercambio de ficheros eMule, según manifestó un participante de la web FORO de CINE .com en un post del día 24 de septiembre titulado “A Garci le salió el tiro por la culata”. Tres días más tarde, en otro post titulado “He visto ‘Tiovivo c. 1950’ de Garci”, alguien confirmaba que efectivamente ya había visto la película de Garci, al descargársela a su ordenador y, efectivamente, se trataba de una de las copias que el cineasta envió a los académicos.

Esto significa, por un lado, que tanto esfuerzo realizado por Garci puede haber quedado en agua de borrajas ya que esa copia compartida en internet, una semana antes de su estreno en las salas, puede rodar como un tiovivo y de hecho, parece ser que ya lo está haciendo. Como consecuencia de ello, la taquilla de la película puede verse afectada. Esta situación puede incluso empeorar más si finalmente la Academia no elige el próximo viernes día 1 de octubre esta película para que finalmente represente a España en los Oscar. Y es que el hecho de ser preseleccionada es un arma de doble filo, más cuando Garci espera estrenar esta película el mismo día que la Academia da a conocer la seleccionada para los Oscar.

La verdad es que siempre me dio mal rollo esa obsesión de Garci por conseguir un segundo oscar, pero creía que luchaba por entrar en ese reducido grupo de directores que han conseguido más de un oscar en esa categoría que premia a las producciones extranjeras, donde se encuentra un quinteto de prestigiosos cineastas como son los italianos Vittorio de Sica y Federico Fellini, el sueco Ingmar Bergman, el francés René Clèment y el japonés Akira Kurosawa. Pero no, parece ser que Garci es más decepcionante de lo que pensaba y por supuesto no es tan romántico como aparenta, ya que como (tristemente) dije sólo le mueven motivos económicos...

(Gracias a Juan J. Acín, por esos datos facilitados)

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