Trapera está aquí
(por Zambraca)
Trapera nace como necesidad de tejer expresiones de un grupo de personas con ideologías diversas e inquietudes personales variadas, por ello la potencialidad de unir todo en un vehículo de difusión común que de forma a este mestizaje de ideas.
Aunque parto de la premisa de que las opciones no están siempre definidas, el camino que uno inicia no supone tambalear ante todo lo que nos sucede a nuestro alrededor, sobre todo con la legitimación de las restricciones de libertades públicas para favorecer todavía más el control de los aparatos de poder a quienes ya se encuentran en los mismos. Y en este asunto los movimientos sociales con fuerza social contestataria han sufrido la persecución en todos sus extremos de este contexto de intolerancia política.
Este precio que en un primer momento pagan quienes más activamente promueven la crítica radical no es más que el principio de una propagación del miedo, que finalmente justifique acciones políticas hechas a la medida de cada acto que se quiere limitar, utilizando los medios que se le ponen a su alcance, como la persecución de las consultas populares, la ilegalización de partidos políticos, el articulado por derrotismo, la falta de libertad para criticar a la monarquía, el apoyo de una invasión ilegal e inmoral, las persecución de los partidos que van más allá de la concepción neofranquista del estado como el caso de ERC, y una multitud de situaciones.
Pero a todo pasos inicial le siguen otros, y es cuando realmente puede ser tarde para reaccionar y contestar, por eso sumarse al proyecto de Trapera es una acto de resistencia de expresión, un reducto con el que manifestar ideas, opciones, crítica, porque por ahora Internet va siendo la herramienta para decir lo que los medios de comunicación censuran a diario para dejar paso al chismorreo de los famosillos.
Trapera debe ser a partir de ahora nuestro rincón universal de expresiones, si bien dispares y seguro que en algunos momentos contrapuestos, pero en el fondo expresiones con total libertad.
Trapera está aquí
Trapera nace como necesidad de tejer expresiones de un grupo de personas con ideologías diversas e inquietudes personales variadas, por ello la potencialidad de unir todo en un vehículo de difusión común que de forma a este mestizaje de ideas.
Aunque parto de la premisa de que las opciones no están siempre definidas, el camino que uno inicia no supone tambalear ante todo lo que nos sucede a nuestro alrededor, sobre todo con la legitimación de las restricciones de libertades públicas para favorecer todavía más el control de los aparatos de poder a quienes ya se encuentran en los mismos. Y en este asunto los movimientos sociales con fuerza social contestataria han sufrido la persecución en todos sus extremos de este contexto de intolerancia política.
Este precio que en un primer momento pagan quienes más activamente promueven la crítica radical no es más que el principio de una propagación del miedo, que finalmente justifique acciones políticas hechas a la medida de cada acto que se quiere limitar, utilizando los medios que se le ponen a su alcance, como la persecución de las consultas populares, la ilegalización de partidos políticos, el articulado por derrotismo, la falta de libertad para criticar a la monarquía, el apoyo de una invasión ilegal e inmoral, las persecución de los partidos que van más allá de la concepción neofranquista del estado como el caso de ERC, y una multitud de situaciones.
Pero a todo pasos inicial le siguen otros, y es cuando realmente puede ser tarde para reaccionar y contestar, por eso sumarse al proyecto de Trapera es una acto de resistencia de expresión, un reducto con el que manifestar ideas, opciones, crítica, porque por ahora Internet va siendo la herramienta para decir lo que los medios de comunicación censuran a diario para dejar paso al chismorreo de los famosillos.
Trapera debe ser a partir de ahora nuestro rincón universal de expresiones, si bien dispares y seguro que en algunos momentos contrapuestos, pero en el fondo expresiones con total libertad.
Trapera está aquí